martes, 12 de enero de 2021

Sin palabras

 Quiero escribirte unas líneas
esas con tonos rojos como mi sangre
esas que te dicen tanto y nada 
esas que siempre callan porque han dicho todo
esas que tienen ojos para mirar lo que quieran
esas tan rebeldes para hacer lo que quieran
esas que buscan tu corazón
tu corazón de niño travieso.






viernes, 5 de junio de 2020

Esperando la luz de la vida

Estoy sufriendo
como una gota de lluvia
que cae sobre esa roca
que no es fértil
que no da frutos
mas solo pesa tanto
como la pena
angustia
y desesperación que estamos viviendo.

Mi mirada se ha estrellado y
hoy puedo ver
tristeza por todos lados
pero hay una
que hoy
es muy grande y pesada,
tan pesada
como esa roca sobre mis hombros.

El túnel que está junto a esa roca
se ha hecho mas largo y
no vemos la luz
se está demorando tanto y
nosotros todos
estamos esperando
afuera
con el corazón en nuestras manos
que está sangrando
gotas de esperanza.

Estamos esperando
la luz de la vida
como esa semilla
que germina
bajo esa gota de lluvia
que empapó su piel.

Sin duda
la vida
tiene demasiados paisajes
unos verdes
arenosos
pedregosos
y otros con olas turbulentas
que suben y bajan
como mi sentir en estos tiempos.



miércoles, 20 de mayo de 2020

Una de rayas que alimenta al mundo



Tantas veces quiero imitarte, me pongo un polo a rayas y quiero volar, volar y volar, pero nunca lo he logrado porque tu eres única en el mundo. Despiertas muy temprano y vas en busca de flores y en tu afán de buscar el polen, lo transportas en tus patitas a otras. Así, en unos días, meses o año aparecen los bellos y deliciosos frutos para alimentar a ese mundo. También preparas en equipo la fresca miel que endulza hasta nuestros mas amargos pesares.

La población está en incremento y se necesitan mas frutos en la tierra y tu juegas un rol determinante en este camino.  Pero triste fue un día cuando te vi partir hacia la eternidad y hoy quiero recordar. Te levantaste muy temprano y tras de ti cientos de abejitas, todas bien uniformadas con su vestido a rayas, llevaban zapatitos blancos y corbatita negra. Ese día había un campo con demasiadas flores y debían reunirse para hacer la fiesta de siempre, ustedes todas en un batallón volaron haciendo formas de estrellas en el aire, llegaron muy cansadas, fueron todas al agua del río, se agacharon, bebieron un poco y luego se peinaron. Así salieron nuevamente para reunirse con las flores, volaron unos minutos y de pronto cada una se posó en una, se dieron muchos besos y luego les vi caer, una a una hasta quedar todas tiradas en la tierra gritando de dolor. Tenían el estómago muy grande, su carita fruncida por el dolor, sus zapatitos seguían brillando pero su vida se había terminado. Grité pidiendo auxilio y ante el profundo silencio, mis ojos se inundaron de lágrimas. El día anterior el dueño del cultivo había puesto un químico para matar a una mosca que se comía los tallos de las plantas. A él nunca le importaron ustedes, mas solo pensó en el dinero para terminar de llenar sus bolsillos. Quizás un día cuando no le queden otros frutos más que los que cultiva, les recordará, pero que pena porque quizas ya sea demasiado tarde.





viernes, 8 de mayo de 2020

Todos estamos sobre la tierra donde nos ilumina la misma luna y el mismo sol



Salieron de mi pecho luces encendidas con fuego que me quemaba hasta el alma, era solo un sueño que me hizo despertar sangrando, mis ojos estaban cansados de llorar, mi boca no podía hablar, mis oídos ya no querían escuchar y mas mis pies, cansados de tanto andar, se volvieron como piedra, grande y pesada que no los pude ni mover.
Salí de mi cama arrastrando mis pies, caminé hasta el patio de mi casa y vi en el firmamento a la luna llorando, la miré fijamente y trató de ocultarse tras una nube, una que tenía forma de ángel, tenía dos alas muy largas y era muy hermoso. La luna no pudo ocultarse y pude ver toda su cara, estaba hinchada, sus ojitos casi cerrados de tanto llorar, pero en un instante pudo abrir su boca para decirme que el mundo está sufriendo y por las noches hay inmensa tristeza, tanta que ya no quiere ni salir.
Le pregunté si este sufrimiento que también me ha despertado, se acabaría un día o una noche cuando ella esté mirando. Me contestó que no lo sabía pero que el sol quien controla el día, lo sabe desde hoy. Al día siguiente lo esperé desde muy temprano, apareció el sol, reluciente, tenía una sonrisa de oreja a oreja, quise esconderme, me dio miedo, me miró de frente, se inclinó un poco y me pregunto si estoy viendo el sufrimiento del mundo,…le dije que sí y que sufro cada día, estaba temblorosa y no le quería hacer la misma pregunta que le hice a la luna,…pero…pensé en la humanidad y me animé hacerlo. Sol, dime cuándo se acabará este sufrimiento, será una noche o un día cuando tu estés presente?...me contestó que no lo sabía, que el también sufre mucho pero tras de esa sonrisa de oreja y oreja está su dolor,…me dijo que el único que sabe es el hombre, él que está controlando al mundo, al día y a la noche
.
Le pregunté al hombre que me diga cuándo terminará todo este sufrimiento porque el mundo está sangrando, hay mucho dolor en pobres y ricos,…pero los más desprotegidos, los olvidados en el mundo, hoy están sufriendo demasiado, su dolor no soporta sus espaldas, hay diferencia en el dolor de pobres y ricos y en los pobres duele demasiado,…el hombre inclinó su cabeza, estaba ruborizado,  estaba llorando sin control, me asusté, quise correr pero pensé en la humanidad y esperé su respuesta,…dime hombre cuándo va a terminar todo esto?,…el hombre toma fuerza, me miró y me respondió: cuando pensemos en todos, cuando seamos más justos en el mundo, cuando haya igualdad porque todos estamos sobre la tierra donde nos ilumina la misma luna y el mismo sol.

martes, 5 de mayo de 2020

...y despertó la madre tierra!

Abrimos los ojos y allí estaba ella, la tierra, todo estaba dicho, todo estaba puesto en cada lugar donde corresponde. Pasaban los días y entrelazados todos los seres vivos estaban en un paraíso sin igual. Qué gusanos estaban paseando en el suelo, cargando a sus amigos los microbios, miles de bacterias, miles de hongos, pajaritos mirando, insectos haciendo rondas en el aire, todos jugando a la ronda. Un día llegó una semilla y se durmió en el suelo, todos aplaudieron, cantaban muy bajito, los gusanos bailaban y los microorganismos se reían, todo era felicidad, todo en armonía. Un día vino la lluvia y todos se escondieron pero grata fue la sorpresa que en unos días la semilla había sacado su cabeza, tenía cuello largo y cuando todos sus amigos la vieron,…ohhh casi se mueren del asombro. Le rodearon todos para aplaudirla y la semilla ya convertida en una hermosa planta se sentía protegida. Que paraíso estaban disfrutando todos!...llegaron las flores y más de cien mariposas rodeando, los insectos se comían unos a otros, eran los buenos que comían a los malos porque la planta tenía que llegar a su final. Las flores se secaron y quedaron los frutos y váyase a ver que cola tan inmensa se había formado para compartir los frutos!... pero que maestra fue la planta que mandó al viento para  lleve cinco semillas pero bien lejos. Todos los seres vivos compartieron los frutos y cuando habían terminado se preguntaron: y ahora de dónde saldrá otra planta?...todos se cogieron la cabeza y algunos quisieron romper en llanto pero una voz muy tierna se escuchó a lo lejos que decía: hijos míos, hijos míos,…no han de llorar ahora porque su hermano el viento ya ha sembrado en otros campos. Escucharon todos, se cogieron de las manos y empezaron a dar vueltas pero el hombre que comandaba a todo el grupo, fue a aquél lugar montado en un tigre, cuidó de esas plantas habiendo después de un tiempo abundancia de alimentos para todos en conjunto.
Pasaron los milenios y el hombre se multiplicó en abundancia, igual lo hicieron los insectos, los gusanos, los microorganismos, las aves, los mamíferos, los hongos,…igualmente se distribuyeron por  todo el mundo pero siempre en armonía, siempre cuidándose unos a otros, todo era un real paraíso!
Un día celebraron el cumpleaños de la cigarra y se quedaron todos dormidos, absolutamente todos,…despertaron revueltos, despertaron asustados, y el hombre?...el hombre ya no estaba, había viajado por todo el mundo para seguir llevando semillas como el viento. A su regreso trajo sobre sus hombros cosas raras, desprendían olores horribles, ya no era el mismo de antes, hablaba solo con más hombres y mujeres y nunca más con quienes por miles de años fueron sus amigos. Al hombre le brillaban los ojos, empezó a sacar los árboles tras los gritos de sus ancianos, aplastó toda hierba perfumada, los gusanos aplastados, los microorganismos llorando, las mariposas desaparecieron, los pajaritos emigraron a otras tierras, los tigres y cigarras estaban pidiendo auxilio, el hombre ya tenía casi todo el mundo en sus manos. Creció su ambición y para triplicar sus cosechas rociaba sobre la tierra y las plantas esas cosas raras con olores pestilentes, esos que mataban a sus amigos del suelo.
Una noche se despertó la madre tierra, tapó sus ojos y se puso a llorar,…qué has hecho hijo mío, dijo al hombre, mataste a tus hermanos, ya no hay bosques, ya no hay aves, ya no hay gusanos, ya no hay bacterias, …aquí no hay vida más la que tú quieres,…hoy tendrás que beber esa agua pestilente, comerás esos frutos de sabor amargo, no tendrás aves que te canten, no tendrás coloridas mariposas que jueguen con tu cabello, no tendrás más que solo lo que te acompaña, tu soledad,…te  tostará el sol tu  cuerpo sin sombra que te proteja, saldrán seres vivos de sus casas y se meterán a la tuya porque tu invadiste la de ellos,…mira hoy todo está en desequilibrio. Mírame!... hoy estoy casi sin vida! …hoy tus hombros te pesarán tanto como pesa el dolor en la naturaleza! 

Para: Ludim Salinas Ortega

A Dios todopoderoso

Querido Dios, cómo estas?...siempre te pedimos que nos ayudes, siempre te pedimos que nunca nos sueltes de tu mano, siempre te pedimos misericordia, siempre arrodillados estamos con tu imagen frente a nosotros, implorando por nuestra vida...siempre, siempre y siempre!,...pero te digo a ti en silencio, que nunca nadie ni yo misma, te preguntamos... cómo estas querido Dios?,...nunca escuché pedir por ti y que tus penas se acorten, que tu pesar por los pecados del hombre desaparezcan,...nunca nadie te preguntó,...cómo te sientes hoy?,...cómo lo pasas cada noche pesada por sentirnos desobedientes?...cómo lo pasas cada día, allí, en cualquier lugar del mundo quizas sin dormir, quizas caminando descalzo porque así puedes sentir el ardor que sienten los pies del hombre que labra los campos, de aquéllos que casi sin fuerza trabajan sacando la riqueza para hacer mas ricos a los que aplastan al mundo donde estamos, tus hijos.

Querido Dios,...cómo estás?,...nuestro egoismo ha invadido el corazon de los hombres y mujeres que solo pensamos en nosotros, mas nunca en ti. Quizás porque seas todopoderoso?...quizas porque queremos dejar allí todo lo que nos está pesando?,...si decimos que tu eres nuestro amigo, que tu nos escuchas, que tu nos limpias de nuestros pecados,...entonces por qué no te damos ese lugar de amigo?...quizas porque cada día siempre estamos nosotros primero?,...querido Dios, aquí tus hijos siempre implorando por nosotros y nunca pensando en ti,...pues si así lo fuera, el mundo estaría cada día mejor.

Querio Dios,...cómo estás?  




Para Kike SaVayoy Ibarra

lunes, 4 de mayo de 2020

Yo no lo sabia hasta que llegaste tu



Los caminos de la vida me trajeron hasta aquí, pero te siento tanto como estar allá contigo. Te pienso y hoy a través de la ventana, tras la tranquilidad del día, tras el verdor de estos campos, en este mundo que no es mi mundo, te extraño, siento tus manos sobre las mias, tienen zanjas profundas, tienen cerros que se acumularon con el tiempo, están tan frias a pesar del calor que tiene tu cuerpo por tu fuerza hacia la tierra, te veo con cosechas tras cosechas, alimentos, hijos de la madre tierra, ...que puedo decirte hoy ante la soledad que inunda a todos en el mundo?...solo que creas en ti, tu eres único, tu eres lo mas grande que el divino ha puesto en la tierra, tu tienes la fuerza que yo no lo sabía hasta que llegó este que tiene corona sin ser rey, éste que ha abierto nuestros ojos para ver la belleza que hay en nuestros campos y en su gente que la trabaja y ellos deben ser nuestra fuente de inspiración para apalancar al Perú. Yo no lo sabía hasta que llegaste tu coronavirus y seguro nos harás mas fuerte para quizas resistir otras pandemias por venir.